Limpieza y Desinfección del Hogar

 

¿Qué es la limpieza?

La limpieza se define como el acto en el cual se eliminan desechos orgánicos e inorgánicos visibles, ésta debe llevarse a cabo utilizando agua con detergentes o productos enzimáticos que sean capaces de eliminarlos. Un residuo orgánico es todo aquel componente que proviene de un organismo vivo o que fue parte de él. (Por ejemplo: Frutas, verduras, carnes, heces, etc.).

Los residuos inorgánicos son aquellos que provienen de materiales que no se descomponen o que demoran en hacerlo, como lo son plásticos, metales, vidrios y gomas, entre otros.

Los tipos de limpieza más comunes dentro del hogar son:

-    Método de fricción (frotar el elemento sucio a mano con un paño, esponja o cepillo).

-    Método de fluidos (usar detergente con agua).

¿Qué es la desinfección?

Al momento de llevar a cabo la limpieza, no aseguramos la desinfección mediante el uso de agua y algún producto para contrarrestar la suciedad. Es por ello, que se utiliza el proceso de desinfección, el cual asegura la eliminación de bacterias, hongos e incluso virus que puedan ser dañinos para el hombre y animales mediante el uso de productos desinfectantes.

Todos los productos desinfectantes que usemos en nuestros hogares deben estar registrados en el  ministerio de salud

En el hogar, puede existir un alto riesgo de transmisión de infecciones, ya que algunos microorganismos pueden sobrevivir por varios meses, generando un elevado peligro, por lo que es esencial la limpieza y la desinfección de superficies y del ambiente.

Estas consideraciones son de mayor relevancia en caso de mantener en casa a personas que se encuentren enfermas, postradas, con hospitalización domiciliaria, sean menores a 2 años o bien sean personas de edad avanzada.

Las recomendaciones generales respecto a la frecuencia de desinfección de los diferentes lugares del hogar, con el fin de evitar algunas enfermedades, son las siguientes:

-    Baño, al menos una vez al día, si se encuentra una persona enferma debiera ser 2 veces por día.

-    Cocina, accesorios de uso diario (lavaplatos, mesones, vajilla, pisos), limpieza después de usar y desinfección diaria (sobre todo en el caso de mesones y pisos).

-    Implementos de limpieza (Esponja, paños de cocina, traperos, etc.), desinfección diaria.

 

Las superficies como asientos, pisos y paredes, no generan un gran riesgo de transmisión de infecciones, por lo que la acción de un detergente generalmente es suficiente para eliminar microorganismos, aunque deben tomarse en cuenta las siguientes consideraciones:

-    Asegúrese de que la superficie esté seca y libre de residuos después de limpiar.

-    Si existe material orgánico presente, se necesita una desinfección adicional. En este caso, puede utilizar un desinfectante en spray o aerosol, que no deteriore las superficies.

-    Cuando se limpian pisos, primero debe remover el polvo y suciedad, mediante uso de trapeador o aspiradora, luego sanitizar con una solución desinfectante y dejar secar, de acuerdo a las instrucciones de la etiqueta.

-    La limpieza de alfombras, requiere el uso de aspiradora de manera diaria y una limpieza completa cada 6 meses o de manera inmediata luego de un derrame.

 

¿Con qué se puede desinfectar el hogar?

Algunos de los productos más utilizados para realizar la desinfección pueden encontrarse en formas liquidas, geles, cremas, toallitas húmedas, aerosoles, pastillas las cuales contienen:

-    Compuestos derivados del Cloro (Hipoclorito de Sodio).

-    Compuestos de Amonios Cuaternarios como son: Cloruro de Benzalconio o Bencilamonio.

-    Alcohol Etílico (Etanol).

-    Ortofenilfenol: Estos compuestos se utilizan con la finalidad de desinfectar y así evitar infecciones comunes, como aquellas transmitidas por el consumo de alimentos contaminados, infecciones en la piel, infecciones respiratorias, tanto en seres humanos como en mascotas que vivan en el mismo hogar.

 

¿Es seguro el uso de un producto que dice eliminar el 99,9% de las bacterias?

Siempre que esté registrado en el Ministerio de Salud o área gubernamental respectiva se ha de considerar que es seguro, si se utiliza según las instrucciones correspondientes. Por lo general, los productos que registran los entes de salud gubernamentales como mínimo eliminan el 99,9% de los microorganismos, cumpliendo con su cometido de aportar a la limpieza integral del hogar.

 

La higiene de los productos con los que se realiza la limpieza

La higiene en el hogar es vital para mantener la salud y el bienestar de las personas que lo habitan e irónicamente vamos descuidando, salvo notoriedad ya no disimulable, de la propia limpieza de los productos y/o enseres  que utilizamos. Mostramos aquí el nivel de sucio y gérmenes que pueden poseer:

 

Estropajos y trapos de cocina. Hay hasta seis veces más bacterias en los paños que usamos para limpiar la cocina que en la tapa del inodoro porque éste lo desinfectamos y los trapos no los lavamos a diario (aunque se crea que por estar mojados, enjabonados y exprimidos ya lo están) y los patógenos intestinales más comunes pueden permanecer hasta dos semanas en una esponja húmeda.

Fregadero. Concentra 100.000 veces más gérmenes que el lavabo / lavamanos / lavadero. Según el estudio, el 14% alberga más de un millón de bacterias por centímetro cuadrado.

Grifos, bañeras, gomas de la lavadora y neveras. La no limpieza de la humedad y los restos de materia orgánica crean un entorno perfecto contra la higiene para el crecimiento de hongos y bacterias y en muchos baños y gomas de lavadora hay moho.

Cepillos de dientes y sus vasos.  El 80% tiene millones de organismos porque son muy pocas las personas que los desinfectan.

Suelos. Los expertos en microbiología dicen que las bacterias necesitan sólo diez segundos para colonizar el objeto que se cae al suelo.

Tablas de cortar y cuchillos. Puede haber hasta un millón de bacterias en una tabla de cortar alimentos aún en las que existe mucha limpieza. No se deben usar para cortar alimentos que se consumen crudos, como ensaladas o frutas.

Aparatos tecnológicos. Teléfonos, pantallas táctiles, mandos o controles a distancia, teclados y videoconsolas están en contacto continuo con las manos e incluso con la cara y los vamos dejando en infinidad de superficies. Podemos encontrar hasta 450 bacterias por tecla en una computadora.

Muebles y picaportes. Por ellos pasan tantas manos que se consideran puntos clave para la transmisión de la gripe y otros virus respiratorios.

Juguetes. Entre el 40% y 50% contienen virus respiratorios y digestivos.

 

Consejos para desinfectar

El portal docsalud.com ofrece recomendaciones para conseguir un nivel de limpieza, higiene y desinfección óptimo en el hogar.
Reproducimos a continuación esta lista.

Prevención de infecciones en la cocina

Higienizar: Lavarse las manos y desinfectar los utensilios, mesadas y tablas de cortar antes y después de tomar contacto con carnes, aves, pescados y huevos crudos.

Separar: Evitar la contaminación cruzada: mantener las carnes y aves crudas separadas de los alimentos listos para el consumo.

Utilizar tablas diferentes para cortar carnes crudas, verduras y alimentos cocidos.

Cocinar: Cocinar bien todo tipo de carne, asegurando una temperatura interna entre 72 y 74°C.

Enfriar: Refrigerar los restos de comida y los productos recién comprados dentro de las 2 horas de cocinados o adquiridos. Dividir los alimentos calientes en recipientes poco profundos, para lograr un enfriamiento rápido.

Seguir las prácticas de limpieza personal e higiene fundamentales:

Lavado de manos: Formar espuma de jabón durante 20 segundos y luego enjuagar.

Desinfección de superficies, utensilios, suelos, mesadas, fregaderos y otros objetos que no toman contacto directo con los alimentos: Luego de lavar, desinfectar con una solución que contenga 1 cuchara sopera de lavandina en un litro de agua (equivalentes: toallitas desinfectantes o espray desengrasantes).

Para tablas de picar y otros objetos que toman contacto con los alimentos: Luego de lavar, desinfectar con una solución que contenga 1 cuchara de té de lejía en un litro de agua.

Desinfección de trapos y esponjas: Luego de lavar, sumergir en una solución que contenga 1 cuchara sopera de lejía en un litro de agua. Mantenerlos en esta solución, renovándola diariamente.

Desinfección de frutas y verduras: Sumergir 10 minutos en una solución que contenga 1 cuchara de té de lejía en un litro de agua. Luego enjuagar.

Prevención de infecciones en el baño

Lavado de manos: Formar espuma de jabón durante 20 segundos y luego enjuagar para mejor limpieza.

Desinfección e higiene de superficies: Para suelos, paredes, tabla del inodoro, lavatorio, bidet y bañera: luego de lavar, desinfectar con una solución que contenga 1 cuchara sopera de lejía en un litro de agua (o utilizar productos ya preparados equivalentes).

Para la taza del inodoro, wáter, sanitario, poceta, taza: Vaciar el inodoro, verter 1 taza de lejía en el interior y cepillar.

Para el depósito del inodoro, wáter, sanitario, poceta, taza: Colocar pastillas desinfectantes dentro del depósito.

Desinfección de trapos: Después de lavar, sumergir en una solución que contenga 1 cucharada sopera de lejía en un litro de agua.

Recomendaciones para desinfectar los juguetes

Higiene del área de juego: Lavar y desinfectar los suelos con una solución que contenga 1 cuchara sopera de lejía en un litro de agua.

Lavar y desinfectar las alfombras infantiles de goma con una solución que contenga 1 cuchara de té de lejía en un litro de agua.

Desinfección de juguetes:

Juguetes blandos: Lavar en lavadora con productos desinfectantes y restregar o cepillar de ser posible para una limpieza más profunda. Tirar los juguetes que estén muy sucios.

Juguetes duros: Después de lavar, desinfectar con una solución que contenga 1 cucharadita de lejía en un litro de agua.

Desinfección de recipientes para juguetes: Después de lavar, desinfectar con una solución que contenga 1 cucharada sopera de lejía en un litro de agua.

Recomendaciones para la higiene y el cuidado de las mascotas:

Desinfectar los suelos con una solución que contenga 1 cuchara sopera de lejía en un litro de agua.

Lavar con detergente los recipientes para alimentos de las mascotas, cubrirlos durante 2 minutos con una solución que contenga 1 cucharada de lejía por litro de agua y luego enjuagarlos.

Argenis Serrano