La higiene de la nevera es fundamental porque este electrodoméstico
sirve para conservar los alimentos con todas sus propiedades.
Para que cumpla con su función, debe tener estas
características:
-
Ser lo suficientemente grande para contener
los alimentos que abastecen a los miembros de la familia, pero sin que resulte
muy atestado.
-
El frío debe poder circular libremente. Revíselo
periódicamente para comprobar, por ejemplo, que no ha ocurrido ningún incidente
que afecte su higiene: un huevo roto, la leche derramada, líquidos dulces que
se transparentaron ero igual acogen gérmenes, etc.
-
Además, recuerde que el congelador debe
descongelarse y limpiarse cuando el hielo alcanza el medio centímetro. Para lavarlo,
utilice los consejos siguientes:
Forma correcta de limpiar la nevera
La nevera ha de limpiarse al menos una vez al mes. Siga
estos sencillos pasos para hacerlo.
1)
Desenchufe la nevera y saque todos los
accesorios, como bandejas, cajones, etc.
2)
Luego, pase un trapo absorbente con agua y
detergente y algo de bicarbonato.
3)
Enjuague, frote con un estropajo y seque con
papel absorbente.
4)
Lave los accesorios de la nevera con agua y
detergente: bandejas, bandejas para cubitos de hielo, cajones.
5)
No se olvide limpiar a conciencia y con
bastante calma y firmeza no rustica, la goma de junta de la puerta. Si
permanece un olor desagradable, deje unos granos de café y con ellos el olor
desaparecerá.
6)
También debe ser igual de escrupulosa con los
envases de de vidrio o plástico transparente que saque y vuelva a meter a la
nevera. Por ejemplo: Un frasco de mermelada al que deberá limpiar de restos que
rebosen al cerrarse la tapa o los envases de las gavetas donde caen los fluidos
de los alimentos.
7)
No deje de revisar el estado de los bombillos
de la nevera y del programador de la temperatura.
Las reglas de la descongelación de la nevera
Lo
que no debe hacer:
Evite dejar los alimentos a temperatura ambiente (20 a
22ºC), cerca de una fuente de calor o el horno templado.
Si el alimento pierde agua, este líquido es el lugar
ideal para facilitar la proliferación de bacterias.
Lo
que sí debe hacer:
Los mejor es que los alimentos se descongelen dentro de
la nevera y que se descongelen inmediatamente después.
También se pueden descongelar en el microondas y
cocinarlos después. El proceso es tan rápido que no hay un riesgo importante de
proliferación de gérmenes.
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